El envejecimiento de los edificios obliga a llevar a cabo actuaciones periódicas de mantenimiento, que tienen como objetivo garantizar el correcto estado de conservación de los inmuebles al largo de los años. De la misma manera, a raíz de la transformación de las necesidades de los usuarios o de un cambio de uso, a menudo se deben realizar reformas de carácter más integral. También existe la posibilidad de que el inmueble en cuestión se vea afectado por una normativa de protección del patrimonio o que, sin estarlo, se le reconozcan valores formales o decorativos que conviene conservar y restaurar.

Es imprescindible reforzar la cultura de la rehabilitación y la restauración de nuestro patrimonio, situándola al nivel de los estándares europeos, donde supone más de un 40% de la actividad del sector de la construcción. Para hacer frente a este reto, en Catalunya disponemos de un amplio abanico de arquitectos preparados para ayudar a ciudades, empresas y administraciones a sacar el máximo provecho de su patrimonio.

Arquitectos y empresas especializadas en rehabilitación energética, estructuras, restauración de patrimonio y urbanismo son algunos de los perfiles que pueden dar valor añadido a tu patrimonio, a la vez que optimizan su mantenimiento.