Con pintura, agua, sal y unas gotitas de alcohol pintaremos diferentes paisajes: florecidos de primavera, más grises de invierno, mares de tormenta e incluso imágenes del espacio. Todo depende de los colores que se quieran usar. Es una técnica muy sencilla y relajante.
Fiesta de Arquitectura
Formació de caràcter pràctic